MAX BROOKS Y LOS ZOMBIS
Max Brooks es el hijo de Mel Brooks, ese cineasta acerca del cual os he dado tanto la brasa en algunas ocasiones; son conocidas sus parodias “La Loca, Loca, Loca Guerra de las Galaxias”, “Las Locas, Locas, Locas Aventuras de Robin Hood” o “Drácula: Un Muerto muy Contento y Feliz”… Bueno, no nos engañemos: sólo son conocidas para mí; ¡para vosotros debe ser como si os estuviera hablando en chino! XD
Bueno, vamos a centrarnos en Brooks Jr. y en sus libros… El chico fue guionista del programa “Saturday Night Live”, pero allá por el 2003 lo dejó y se dedicó a investigar… sobre los zombis. Reíros si queréis, pero es una amenaza mucho más seria de lo que creéis.
Afortunadamente, SSMM los Reyes Magos han tenido a bien traerme los dos libros que Max Brooks ha escrito hasta el momento sobre el tema. Ahora escribiré sobre “Zombi: Guía de Supervivencia”. En un post posterior, y cuando las circunstancias lo permitan, contaré algo sobre “Guerra Mundial Z: una historia oral sobre la guerra zombi”.
Aunque la “Guía” fue escrita en el 2004, sólo en una fecha tan reciente como septiembre del 2008 se publicó por fin en España. Quisiera, antes de nada, lanzar mi única pero devastadora crítica sobre esta obra…
La traducción es una de las peores a las que he podido tener acceso en mi vida. Recuerdo que sólo me ha pasado algo parecido con una edición cutre de “Drácula” (de ésas que venden en los puestecillos de las playas) que, por desgracia, cayó en mis manos… ¿Sabíais que luego saqué de la biblioteca una edición distinta de “Drácula”, sólo para quitarme el mal sabor de boca?
Pero me estoy desviando… Como decía, la traducción es nefasta y parece realizada a toda velocidad con un programa de ordenador. Lo más extraño es que no fue una persona la que perpetró “esto”… ¡fueron dos! Debo hacer constar sus nombres para preveniros con la suficiente antelación. ¡Nunca os hagáis con algo a lo que hayan podido meterle mano!
-Helena Bosch Íniguez.
-Luis Gámez.
Es bien sabido que una traducción literal no suele concordar con el sentido que se le da al texto en su conjunto, debido a los diversos y ricos matices que caracterizan cada lengua. Una expresión en inglés puede encontrar su equivalente en español, pero seguramente la expresión en nuestro idioma será distinta. Hay que ser consciente de la realidad de cada lengua… y, en ese sentido, las personas que han perpetrado “esto” debían haber estado inconscientes mientras tanto. ¡Quién sabe, puede que realmente sean zombis! Lo cual no deja de ser irónico… Por si acaso, vosotros no os hagáis jamás con obras de la Editorial Berenice, cómplice de esta infamia.
El tema es doloroso y si tuviera que poner ejemplos el post se alargaría todavía más; baste decir que me estoy planteando buscar “The Zombie Survival Guide” en su idioma original; ese inglés que, literal y metafóricamente, ha sido violado ante mis ojos…
Bueno, hasta aquí la parte “métele hacha”. Centrémonos ahora en la obra en sí, en la genial lucidez de su autor, Max Brooks, que ha conseguido darle al género de zombis un aire distinguido y elegante, a la par que sutilmente cómico. Permitidme transcribir algunos de los comentarios de la contraportada.
“Tan minucioso y bien documentado que asusta más que divierte.”
“Dudo que lea un libro más inquietante este año… Brillantemente escrito, morbosamente divertido, completamente convincente.”
“Un libro que empiezas a leer por diversión hasta que, al llegar a la página 50, sales a comprar un machete sólo para sentirte seguro.”Aquí os dejo el resumen del libro que se incluye, también, en la contraportada.
”¡No descuides tu mayor tesoro: la vida! Este libro es la clave para sobrevivir a las hordas de no muertos que pueden estar acechándote en este preciso momento sin que lo sepas. [La Guía] ofrece protección completa contra los muertos vivientes gracias a útiles consejos para salvaguardar tu vida y la de los tuyos. Este es el libro que podría salvarte la vida.”El libro, pues, parte de una inquietante premisa: los zombis existen y cualquier día puede haber un brote cerca de nuestra casa. En ese caso, lo mejor es estar preparados; y el primer paso es tener los conocimientos que nos permitirán hacer frente a la temible amenaza de “los muertos vivientes”.
Se describe científicamente cómo el origen del mal es un virus denominado
solanum, que fue descubierto por el doctor Jan Vanderhaven. El virus penetra en el torrente sanguíneo, llega hasta el cerebro y se reproduce a la par que destruye el lóbulo frontal; después, cuando parece que el sujeto ha muerto, la temible criatura en la que se ha convertido se levanta de nuevo. El zombi no siente dolor, frío, cansancio… No siente nada, no piensa nada… Sólo le mueve un brutal instinto: ahitarse de carne, preferiblemente fresca, cruda y… ¡humana!
Naturalmente, lo vital es destruir el cerebro del zombi. Hay varias maneras de conseguir esto:
1) Machacándole el cráneo con algo contundente.
2) Atravesándole el cráneo con espadas, flechas o balas.
3) Decapitar al zombi, pero… ¡cuidado!, la cabeza todavía puede morder y aún habrá que destruir el cerebro.
Deshacerse del cuerpo es de vital importancia. Lo mejor es prenderle fuego. Siempre hay que tener cuidado, para evitar que los fluidos del zombi penetren en nuestro torrente sanguíneo. No querréis terminar convertidos en esas “cosas”, ¿verdad?
También se incluyen consejos para detectar brotes de zombis, e incluso se clasifican dichos brotes en diversas clases: clase 1, clase 2, clase 3… y clase 4, también conocida como “el Día del Juicio Final”.
El capítulo sobre armas es muy importante. Es imprescindible familiarizarse con ellas, entrenar con ellas, cuidarlas y mantenerlas… El autor detalla los pros y los contras de cada una. A título meramente ejemplificativo, resumiré la opinión del autor sobre las dos armas que aparecen en la portada del libro.
1) La carabina semiautomática es la mejor arma que puedes utilizar para enfrentarte a los zombis. Tanto el arma en sí como la munición pesan poco. El modo “semi” sirve para ahorrar munición, pero permite enfrentarse a varios zombis al mismo tiempo. En un brote documentado en los USA, una mujer consiguió matar con este arma a 12 zombis… ¡en 15 segundos!
2) La motosierra es muy poco práctica. Demasiado ruidosa, demasiado pesada… Requiere combustible (más peso todavía) y, como te descuides, puedes amputarte tú mismo una pierna. Una de las peores armas.
Así pues, lo importante es la fiabilidad, la livianidad y la precisión. De poco sirve una gran potencia de fuego contra los zombis si dicha potencia no se usa adecuadamente. En cuanto a las armas para el cuerpo a cuerpo, el autor recomienda los machetes, las katanas y unas armas shaolin que, lamentablemente, son difíciles de encontrar.
En los siguientes capítulos se desarrolla todo lo que debes saber para sobrevivir con éxito en cualquier situación, tanto si decides quedarte en un lugar seguro como si decides largarte de allí. También hay tácticas y consejos para el caso de que decidas convertirte en un cazador de zombis. Incluso se dan recomendaciones para el peor escenario posible: el Día del Juicio Final.
Resulta muy interesante la última parte, en la que se describen algunos brotes documentados a lo largo de toda la historia: desde la Bretaña romana hasta los USA en la actualidad, pasando por la Europa medieval o la Manchuria ocupada por los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial.
Para ir terminando, diré que Max Brooks logra darle un aire suficientemente creíble a su obra; se nota que ha leído e investigado mucho y que sabe de todo un poco. Por fortuna para el lector, todo eso no significa que el texto sea farragoso y soporífero; al contrario, la Guía está impregnada de un peculiar sentido del humor y es muy amena… aunque puede que no necesariamente divertida. Y es que se da tal aire de verosimilitud a todo lo relacionado con los zombis, que uno incluso llega a temer que realmente existan; y, en tal caso, el asunto sería bastante serio.
En resumen – Un libro genial que puede enganchar e incluso entusiasmar a los que no están muy interesados en esto de los zombis. Tan bueno que incluso merece la pena leer la horrible traducción al castellano.
PD – Y recordad, próximamente… ¡Guerra Mundial Z! Adelanto que Max Brooks no es César Vidal; no tiene nada de copipeist y sus dos obras se complementan estupendamente. De hecho, yo recomendaría leer la Guía para irse haciendo una mejor idea del asunto… y después pasar al “plato fuerte”.
PPD - Acabo de darme cuenta de que, en la versión original, en la portada, hay un machete en vez de una motosierra. O sea, que sustituir un arma ligera y tremendamente efectiva por otra pesada y prácticamente inútil ha sido otra genial ocurrencia de la Editorial Berenice... [ironic]¿Quién podía esperarse algo así de la Editorial Berenice?[/ironic]