CRIANDO MALVAS
Ésta es esa serie de la que ya habíamos oído hablar, con el nombre de “Pushing Daisies”. La premisa de la que parte es bastante original: un chico descubre que tiene el poder de revivir a los muertos. Sin embargo, ese poder está sujeto a unas limitaciones bastante jodidas:
1) Si el chico vuelve a tocar al “revivido”, éste morirá ya para siempre.
2) Si el “revivido” permanece “re-vivo” más de un minuto, otra persona que haya cerca morirá en su lugar.
Tras una introducción acerca de la infancia del protagonista, la acción se desplaza hacia el futuro, en el que el chico se ha transformado en un pastelero que, ocasionalmente, colabora con un detective-cazarrecompensas (nada más útil que poder interrogar al muerto, aunque sólo sea durante un minuto) para que el negocio siga tirando. Cabe señalar que el protagonista es una buena persona; si alguien malvado y ruin tuviera ese poder…
Todo esto se narra en clave de comedia, mezclando la burtoniana estética colorista de “Big Fish” con la peculiar voz en off de “Amelie”. Casi podríamos decir que se trata de un cuento contado (valga la redundancia) con algo de recochineo.
Resulta frívolo tomarse a risa algo tan serio como la muerte. No obstante, cuando te haces a ese tipo concreto de humor negro y macabro, es sencillo reírse con alguno de los frecuentes puntos que tiene la serie.
Una historia original y un buen ritmo redondean el resultado final. Merece la pena, por lo menos, ver el primer capítulo.