Pues si.
He visto esta película, soy lo suficientemente espartano como para verla.
Ahora empecemos el análisis.
De los directores franceses Frédéric Forestier y Thomas Langma nos llega esta nueva película basada en los famosísimos libros de Aterix el galo.
En ella repite papel Gerard Depardieu como Obelix y nos encontramos curiosas nuevas incorporaciones como la de Elsa Pataky o Santiago Segura.
El film que dura dos horas, ha sobrepasado los límites que una película puede marcarse para hacer los escenarios con ordenador, tanto es así que los decorados del god of war 2 me parecían más creibles que la Acropolis de la pelicula.
El guión, una mezcla de Asterix y las doce pruebas, con un par más que no recuerdo, se queda bastante flojucho y pierde el encanto y la gracia de su homónimo en el papel.
Los actores lo hacen bien, sin extralimitaciones, Depardieu lo hace bien, solo eso. Aun que ha que decir, que la película es muy pero que muy friki, haciendo guiños a otras películas casi constantemente, y uniendo esto a las apariciones de varios personajes muy conocidos en el esfera del deporte, como a chumaker (si, paso de buscar como se escribe) y a Zidane.
La música no es nada del otro mundo y pasa indiferente durante las dos horas de película.
En cuanto a efectos especiales, los directores no consiguieron encontrar lugar apropiado para los lujosos efectos que hoy en día hay en el cine, no consiguiendo que éstos parecieran naturales sino más bien muy pero que muy forzados, a excepción de cuando ingieren la poción mágica.
En cuanto a la trama. Bruto, la plaga personal del César (ave, yo) quiere casarse con la hija del rey de Grecia, pero ésta estando enamorada de un galo le reta a ganar los juegos olímpicos, y allá vamos, inmediatamente se unen Asterix y su gordinflón compañero. Entre prueba y prueba Bruto no dejará de intentar matar a su padre.
Recomiendo la película si os gustaron las anteriores entregas, sobre todo la segunda. Sino es así mejor pasar de largo.