¿Atrapados? Huida hacia el norte.

Después del devastador ataque del sacerdote armado sobreviene la oscuridad.
¿Que será ahora de los aventureros? ¿Qué será de la espada maldita y del preciado libro que Keira poseía?

Los arrogandotes protagonistas, convencidos de su propio poder, no temieron gritar acerca de robos y asesinatos ante una barrera de la inquisición. Se olvidaron de que, a pesar de haber vencido al Séptimo, siempre hay un pez más grande.
Sus despistes y equivocaciones les han llevado hasta la prisión de uno de los enemigos más terribles de todo Gaïa, la Santa Inquisición.



Despertáis. Sentís un agudo dolor en el pecho, y sobre todo agotados.
Sobre vosotros notáis un luz azulada que brilla con leve intensidad, cuando alzáis la vista para ver de qué se trata véis que proviene de un símbolo tallado el la piedra sobre vuestras cabezas. Parece el sello de la Santa Inquisición y parece ocupar los dos metros por dos que ocupan vuestras celdas.
Más allá de los barrotes no veis más que una puerta al otro lado de la sala y una mesa y una silla en mitad de la estancia.
No parece haber ningún guardia.
La luz parece ahogaros, no es asfixia de verdad, podéis respirar sin problemas, pero os impide canalizar vuestros poderes.

Siempre hay un pez más grande.
Dice Keira a si misma al despertar en aquel lugar, ¿y pensar que Willem era poderoso?, realmente Gaia está poblado de personas de un poder inconmesurable...
...y el padre Alexias es uno de ellos.
Afortunadamente pude observar que sonreía cuando atacaba, no era uan sonrisa para demostrar su poder sobre los demás, era una sonrisa que demostraba afecto, quizas llego hasta aquí porque cree que hace lo correcto, así que aunque sea agarrarse a un clavo ardiendo, puede que no sea muy fanático y se pueda razonar con él.
"Bien, veamos las posibilidades" -piensa fríamente Keira mientras anda lentamente por la habitación- "no tengo mis poderes, como con los esclavistas, así que habrá que usar la razón, ya que también me siento muy debíl. Si me quedo aquí sin hacer nada moriré quemada junto con Yulan, tachandonos de brujos, sin embargo puedo mostrarme racional y hablar con el padre Alexias, antes siquiera de que él venga a recogerme (que seguro que lo hará), y decirle toda la verdad, o al menos parte de ella, pero así al menos me mostraré que no ha sido más que un malentendido, porque es solo cuestión de tiempo a que él vea el libro, ya que yo no sé ocultarlo como Willem.
Después de eso ya veré que es lo que puedo conseguir"
Así pues me levanto pesádamente y grito:
-!Guardias¡
Un rato más tarde llega uno de los guardias y pregunta:
-¿Qué quieres bruja?
-Quisiera hablar con el padre Alexias, creo que se ha cometido un malentendido y no creo que debamos de estar aquí, dile que quisiera hablar con él, seguro que me recibirá, pues tengo una importante misión que realizar.
Acto seguido espero al comportamiento del guardia y a que todo salga como espero.



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Yulan esta agobiado. No solo por la luz mágica, sino por todo el tiempo que esta perdiendo.
Al oír lo que dice Keira este dice:
- No servirá de nada, solo quieren la información que esta relacionada en parte con la iglesia. Después moriremos quemados. Porque la inquisición no quiere a gente como nosotros. Aunque seamos creyentes. Creo que estas perdiendo tiempo. Solo tenemos que sobrevivir lo más posible.-


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El tiempo pasa y nada cambia salvo la oscuridad. Ésta, poco a poco, va devorando los rincones de la pequeña sala en la que estáis.
A la hora ya no hay conversación entre vosotros. No hay nada más que decir. Solo. La eterna espera.

Ahora que tenéis tiempo empezais a reflexionar sobre los errores que os han llevado allí.
El descubrimiento de Keira debería de haber aportado algo más de responsabilidad, pero en vez de eso, se dejó consumir por el odio.
En cuanto a Yulan, se quedó cegado por el abandono de Keira y en vez de actuar con decisión no dejó de dar leves pasos tituveantes.

Ahora vuestro errores se materializan en esa pesado losa con el símbolo de la Inquisición que os roba vuestras habilidades.

Las dudas os acosan. ¿Sabrán que es en realidad la espada maldita? ¿Habrán leído el relato?

y la más importante...

¿Nos van a matar?

Aunque los dos pensais en las mismas preguntas no quereis darle forma haciéndolas en voz alta.


Pasada lo que parece ser una eternidad se abre la puerta.
Aparece el mismo padre que os abatió, pero esta vez en lugar de llevar espadas, parece llevar un libro.
Se sienta en la única silla que hay en la estancia, abre lentamente el libro, y con voz tranquila y reposada os dice:

-Bueno, antes de nada, ¿quienes sois y qué asuntos os traían a Cedonia?

Yulan mira apáticamente al padre. Ve el libro y piensa que seguramente será para darnos beneficencia antes de ir al supuesto cielo. Pero antes tendremos que darle información. Probablemente sea por Willem o cualquier otra cosa relacionada con el caso.
Después de un rato que el padre este mirando a Yulan y a Keira, el chico empieza ha hablar de una forma lenta y cansada. Como si hubiese contado lo mismo toda su vida:

- Padre, yo soy Yulan. Viví en un pueblo denominado Garridos, pero este fue destruido y con el toda la población, aparte… yo. El causante fue un hombre con el mismo objetivo que el que asalto Cedonia hace una semana. Sin saber que hacer fui sin rumbo hasta que acabé en esta ciudad y sucedió lo ocurrido. En el camino conocí a esta mujer. Esto es lo que pasó.


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-Padre Alexias -le dirijo una actitud de reverencia, demostrando el gran honor que es estar en un puesto tan alto de la iglesia- primero quiero pedirle disculpas por tener que dirigirme hacía usted en este lamentable aspecto. Me llamo...Keira, y...la verdad, creo que ha ocurrido un malentendido, estoy en mitad de una misión de suma importancia, creo que usted ya sabe a que me refiero, ya que estoy segura que han revisado mis pertenencias. -durante toda la explicación, Keira procura mantener la cabeza algo bajada del Padre Alexias, lo suficiente como para darse cuenta de la formalidad pero no lo suficiente como para ser una impertinencia.
"Bien, y ahora, aquí es cuando me lo apuesto todo en una sola carta, espero que funcione, tratare de ser lo más correcta posible" -pienso cuando hago una ligera pausa, para decir a continuación:
-Bien, la explicación de todo esto es largo pero estoy segura de que se lo puedo explicar correctamente

-¿Se acuerda usted de la Orden XIII?, esta fue disuadida por la iglesia después de varios siglos, pero, sin embargo, resucito.
Tras la gran derrota de la última generación de la orden XIII en la aldea que más tarde paso a llamarse como uno de los miembros, Garrios, decidieron salvaguardar la espada.
Sin embargo, Adrien volvio al pueblo y obtuvo la espada, después de saquear todo el lugar, las únicas personas que quedan vivas en la aldea somos él y yo.
Afortunadamente uno de los nuevos miembros de la orden XIII consiguió impedir el avance de Adrien lo suficiente como para que nosotros huyéramos de la espada, pero este miembro de la orden, conocido por la aldea como el padre Fabrizio, consiguió no se como comunicarse con su discípulo, el nuevo séptimo.
Este nos persiguió hasta Cedonia para obtener la espada, pero no pudimos entablar conversación con él -aunque la verdad esque ella ni quería hablar con Willem- así que le tuvimos que matar, y así fue como obtuve ese libro.

- Luego nos fuimos de ahí para curarnos las heridas, pero al volver nos encontramos con el control de seguridad, queríamos huir de ahí ambos para no tener que lidiar con la guardia, ya que probablemente nos echasen las culpas por lo sucedido, así que intente escapar rápidamente de ahí con mi compañero, pero fuimos capturados por usted.
¿Me explico, Padre Alexias?
"Por Dios, que funcione y que no nos mande a la horca de inmediato por todo lo que le he dicho" -piensa desesperádamente Keira



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Mientras Keira da rienda suelta a su relato notais como el padre cada vez se va quedando más estupefacto.

Cuando Keira termina se hace el silencio durante 5 minutos, cuando parece que el padre recobra la compostura dice sonriendo:
-Muy bien criatura, por último decidme. ¿Conoceis a la criatura Nolan o sabeis dónde se le puede encontrar?

-Conocemos a ese personaje, lo encontramos en una cueva a las afueras de la ciudad, pero este se fue, ¿puedo preguntar para que lo quiere?, si no es mucha indiscreción... -le digo con tono tranquilo, como si se hubiera quitado un gran peso de encima por haberle dicho eso


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Yulan parece tan estupefacto como el padre al saber todo lo que Keira ha dicho. Según él no debería haberlo soltado tan fácilmente. Pero ahora también esta envuelto Nolan. Y a Keira se le ha ido la lengua otra vez.
Yulan sabe que es inútil decir que no sabe donde esta. Así que permanece en silencio. Yulan mira a Keira sin ninguna expresión. Pero dentro de él arde una gran ira.
“Con todo lo que ha hecho el por ti, tu vas y le dices que le conocemos. Eres un ser miserable que merece ser ahorcada la primera” Piensa furiosamente Yulan

Sin decir nada Yulan espera la repuesta para Keira del padre…


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-Consideraremos traidor a la Santa Madre Iglesia a todo aquel que conspire con los demonios o no ayude en todo lo que el Santo Oficio necesite para capturarlos, y recibirán la misma purga que los demonios mismos.
Así pues pequeño, te lo pregunto de nuevo.
¿Conoces el paradero de la criatura Nolan?

-Si me disculpa Padre, no ceo que sea un demonio, me parece más bien que no sabe muy bien que papel representa en este mundo, el nos entrenó, y gracias a su entrenamiento no solo nos salvó de la actuación de Willem en Cedonia, sino que una semana más tarde pudimos derrotarle, considerando que no somos expertos en nuestras áreas bélicas hay que decir que, como Septimo, era una criatura muy débil, y si se hubiese llevado la espada al matarnos Adrien podría haberla recuperado con una facilidad extrema, y eso la habría enviado a Él. Aunque pueda parecer muy dificil de creer ese muchacho ignorante acaba de salvarnos de un gran peligro, inconscientemente de que lo sepa o no.
Una vez oí decir que no existen personas malvadas. sino acciones malvadas, sea lo que sea que pudo hacer antes, creo que se le puede perdonar gracias a que la espada sigue en buenas manos, de momento.


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“Decirle que no le conozco ahora es inútil, Keira lo ha fastidiado. No tengo más remedio si quiero saber más del asunto.”

- Padre, como ha dicho la mujer… yo se que se refugia en una cueva a las afueras de la ciudad. Pero antes de ser capturado el se fue y ahora no se donde podrá estar. Lo siento Padre.-
Dice Yulan con un tono apático.


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-Mujer, hablas mucho de cierta espada, de un Séptimo y alguien llamado Aldeir, o algo así. La espada supongo que es aquella que te requisamos, la negra. Ciertamente hay algo inquietante en ese filo. Pero... ya me contarás más acerca de ese Séptimo o lo que sea.
Por ahora lo que queremos es la localización de la criatura que se hace llamar Nolan. ¡Decídme dónde se encuentra!

"Nadie se libra del fanatismo al fin y al cabo, y lo peor es que ya ha perdido los estribos y le he dicho todo lo que yo sabía, y encima no tiene ni idea del libro, simplemente alucinante"
Keira sonríe, o intenta hacer una sonrisa al ver la locura que esta tomando la conversación y dice:
-Como ya le he dicho, Padre Alexias, no tengo ni la menor idea de donde está Nolan, le dijimos que se situaba en una cueva, y siquiere se la mostraré, pero por supuesto no sabemos adonde ha ido ahora, pues al fin y al cabo se fue, espero haber sido clara al respecto.


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-No se donde puede estar ahora, solo se que tenia asuntos que hacer en la ciudad de Cedonia el día antes de que nos capturaran. Luego no le vi más, Padre-
Dice Yulan con el mismo tono que antes. Aunque en el mismo esta amargado por hablar de Nolan.



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-Pues si no me podeis decir dónde se encuentra exactamente me tendreis que decir a dónde suele ir o qué puede estr haciendo aquí. ¿Se tenía que reunir con alguien?

-Vale, resumamos, -decia Keira con tono cansada- Nolan, entre otras cosas, es un ser muy frío y reservado, en todo el tiempo que estuvimos con él, no nos dijo nada sobre él, así que lo único que sabemos de él son sus habilidades y que tiene una cueva cerca de esta ciudad.
"Espero que ahora Yulan me siga la corriente esta vez, porque sino vamos a ir a la hoguera de una forma tan rápida que apenas podremos siquiera percibirlo"



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-A pesar de estar algun tiempo con el, no sabiamos muy bien que estaba haciendo. El solo nos entrenó. Era muy callado y no nos decia nada de su vida. Realmente no le puedo decir casi nada de esa persona... aparte de lo que ha dicho la mujer-
Dice Yulan



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-Entonces supongo que me sois inútiles. Dentro de un rato el encargado habrá preparado los informes, se os darán para que los firméis y luego un tribunal considerará cual será vuestra pena. Ahora me tengo que marchar.

Dicho eso el padre se levanta, abre la puerta y se marcha, dejandoos con la incertidumbre de qué pasará. Además teneis el sucio resentimiento como compañía pues sabeis que habeis traicionado a una de las pocas personas que os ha ayudado desinteresadamente. Puede que Nolan nunca se entere, y suponeis que será más seguro para vosotros así.
Pero en vuestro interior sabreis la verdad. Sabreis que en el momento de apoyar a un camarada no vacilasteis en delatar y traicionar. Si todavía os queda algo de humanidad os preguntaréis si de verdad merecis salir con vida de las garras inquisidoras.

Hasta que lleguen los escritos volveis a estar a solas en vuestras celdas...

"Vale, pensemos en la situación, al fin y al cabo hablar con el Padre no resuelve nada, lo más que puede decir es que nosotros somos brujos y locos, poseidos por una extraña espada oscura, así pues me quemarán y probablemente den la espada a Tol Rauko"
Ya que vamos a morir, necesitaré jugar toda la baraja de cartas, así que sea como sea he de conseguir que me escuchen, pero para eso he de conseguir que alguien llegue hasta aquí.
-¡Guardias! -grita Keira
Al cabo del rato sale uno de ellos:
-¿Y ahora que bruja?
-Es cierto que he pecado y he de pagar por ello, y por eso me gustaría confesarme, por favor, necesito, por el bien de mí alma, que algún inquisidor venga a confesarme, si quiere puede quedarse con él para asegurarse de que no le haré ningún daño, pero necesito confesarme- le digo en el tono más cariñóso que podría tener.
[Tirada de Persuasión]



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-¿Por que tuviste que hablar Keira? Sabes perfectamente que vamos a morir y aun así le dijiste todo al padre. Ellos no les importa tu bondad o si crees de verdad. Si sabes y tienes poderes, ellos te pillan y mueres aunque lo confieses con toda la fe del mundo.
Ahora tenemos que morir amargados con la pena de que hemos hecho todo lo contrario a nuestros principios. Solo espero que Nolan nos perdone por nuestro egoísmo. Pero a pesar de todo ya no puedo vivir o morir con la cabeza alta.-

Dice Yulan con un tono que no muestra ninguna emocion



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-Al fin y al cabo nadie te va a echar de menos, lo único que quiero de ti es que te calles, y si piensas con un poco más inteligencia, sabrás que con la Inquisición no hay mentira posible, les dices la verdad y ya esta, y es mucho mejor decirsela con naturalidad que decirla sonsacada de la tortura, ¿no habías pensado en eso verdad? -le digo con un deje irónico
-Y ahora por favor te agradecería enormemente que te calles, pues espero a ser confesada por mis pecados

"Al fin y al cabo, es bastante probable que escuchen la conversación, así que prefiero que no oigan nada raro de mi o de mis planes que pienso hacer" -piensa Keira con normalidad


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-La inquisición solo confiesa sus pecados mediante la hoguera. Además no creo que un inquisidor pierda el tiempo en tu historia. Estamos muertos mí querida Keira. Volverás a saborear el fuego. Solo es cuestión de tiempo-
Dice Yulan con una falsa sonrisa


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